Frane Selak ganó un millón de dólares en la lotería. Hasta ahí, nada demasiado raro.
Lo increíble es que antes sobrevivió a siete accidentes mortales:
– Un avión que perdió la puerta en pleno vuelo.
– Un tren que descarriló.
– Dos coches que se incendiaron.
– Un autobús que cayó a un río.
– Un atropello.
– Un camión que casi lo aplasta.
¿Suerte o destino?
Ahora olvídate de Selak. Hablemos de ti.
¿Crees que no tienes suerte? Lee esto:
– Hace siglos, tu linaje entero sobrevivió a guerras, pestes y hambrunas. Millones murieron. Tú ganaste.
– Hace años, un espermatozoide entre 250 millones fecundó un óvulo. El resto murió. Tú ganaste.
– No naciste en el siglo XV ni en medio de una guerra. Estás en 2025, con acceso a internet y todas las comodidades que un rey del pasado envidiaría. Tú ganaste.
Has ganado la lotería más improbable: la de la vida.
Así que sigue jugando, porque vas a seguir ganando.
Está claro. Muy claro.
El libro de los ganadores
Abrazo.